Hay un refrán que dice que «lo que bien empieza, bien acaba». Y quizás será por eso, que me ha costado y le he dado tantas vueltas a esta primera entrada del blog.
Pues bien, después de ojear mis blogs favoritos para inspirarme, tomar algún café que otro, hacer varios tachones en mi borrador de ideas, escribir, borrar, escribir y volver a borrar y hacer una lista del posible contenido de este post (¡cómo me encanta hacer listas para todo!), he optado por no redactar sobre algo en concreto, sino hacer un mejunje de mis ideas y que sea el teclado el que escriba por mí. Así que a este primer post lo llamaré «El post de todo y de nada».
Pero aunque trate de todo lo que quiero hablar y de nada a la misma vez, éste podría haber sido un buen primer artículo en el que dar las gracias a todos los que me han apoyado en este proyecto, o podría haberos dicho que éste será un espacio donde iré subiendo mis trabajillos y mis ideas acerca de la publi. También podría ser un buen inicio para contaros mi pasión por el marketing y la publicidad. Quizá podría haberos contado la ilusión que me hace llevar a cabo este proyecto. Podría haber escrito de todo eso, sin embargo, he preferido escribir de todo y de nada.